24.2.08

129 - Puertapájaro





Pequeña historia que explica una obra.


Andaba algo atareado, paseando de arriba a abajo a lo largo de una nave industrial esperando a poder pagar una factura por una compra realizada. Me habían dicho que esperase unos minutos.

Repetidas veces pasé al lado de un camión, no muy grande. Una de las veces, y por simple curiosidad, estiré el cuello para ver que había dentro de la caja.

Era un camión con chatarra. La nave a la que hago alusión, trabajaba con hierros.

La visión fugaz no me dijo nada, excepto... chatarra.

En la siguiente pasada, algo me llamó. Me llamó, no digo me llamó la atención. Ese algo era un conjunto de recortes de hierros, entrelazados, apelmazados. Y me gritaron ¡Llévanos! ¡Somos lo que está en tu cabeza!

No sé como lo supieron, pero efectivamente, estaban en mi cabeza... o se las apañaron para meterse en un descuido, mientras miraba la chatarra. Un camión lleno de chatarra.

Pensativo, continué con mi paseo nave arriba nave abajo. Es un decir, la acera era plana.

En una de las pasadas, coincidí con el conductor del camión. Le pregunté, ¿y que se hace con esto? Me miró sorprendido. Me miré sorprendido al hacer una estúpida pregunta para la que ya tenía respuesta. Aún así me respondió. Nada, que es chatarra y va para una fundición. Obvio, me dije.

Di otro paseo más y volví. Oiga, le dije. ¿Y ésto se puede vender? Otra pregunta tonta. ¿Ésto? No. Ya está vendido. Salgo ahora para la fundición.

¡Espere! Yo quería unas piezas que he visto dentro del camión. No le dije que me habían llamado. Pensaría que estaba loco, y si lo estoy, tampoco es cosa de ir contándolo.
No puede ser, me respondió, la carga del camión ya está vendida.

Bueno, dije rápido, ¿a cuánto está el kilo de hierro? Me respondió vagamente con varios precios, ¡vamos, que no lo sabía seguro!

Bueno. Solo quiero unas piezas, le expliqué mientras metía la mano en el bolsillo. Mire, tengo cuarenta y tres euros. ¿Que le parece?

Ya se puede imaginar el final de la historia. Con desgana me soltó, coja lo que usted quiera (me trató de usted, algo que no recordaba lo que era). Y hecho. No fui avaricioso, solo cogí aquellas piezas que me habían dicho ¡llevadme!

Me ayudó a meterlas en el coche. Yo las trataba con delicadeza, como algo vivo. Con sufrimiento ya que estaba guardando algo, que desmembrado, lo percibía como un todo.

Terminé pagando la factura y ya en casa... no me echó a la calle, ya sabéis quién, la mujer casada que duerme conmigo. ¡Hasta se lo tomó bien! Lógicamente me preguntó que pensaba hacer con esos trozos de hierro.

¿Qué pensaba hacer? Llamé a mi amigo, el que tiene un soldador. Quedamos para un sábado y antes de comer, o después, no recuerdo, comenzó a aplicar unos puntos de soldadura en los lugares que le iba indicando.

Y así nació puertapájaro. El pájaro eterno para mis pajarillos. El lugar donde posarse, por él que pasar, reunirse, comer… los distintos pájaros a los que he invitado.

Le hice un pequeño pedestal de piedra arenisca, a fin de que pronto pudiera admitir la humedad y el verdín como elementos decorativos, y ahí está. Ahora es frecuentado por mis petirrojos, una o dos parejas, depende, los mirlos, lavanderas, jilgueros, urracas y por supuesto… bandadas de gorriones.

Bienvenidos todos.
***

Puertapájaro es mi primera, y última, escultura de gran tamaño.
Mide 162 cm de altura, sin pedestal, con una envergadura de 186 cm.
Las piezas son de un grosor de dos centímetros y medio.
Pesará unos 130 kilos. Su color es natural, acero oxidado.
Está emplazado en el jardín de mi casa.

*


texto: Puertapájaro - 080224
fotografía: @-FB-444-Puertapájaro-3093 [R40]


*
*
*

30 comentarios:

Ivana Carina dijo...

Primera! ajajjajaa!

Sweety!
¿Cambiaste la decoración?, bien!, renovarse es vivir decía mi mamá...

Y tu escultura.... genial!!!
Menos mal que le hiciste caso a los hierros que te llamaban..., los pájaros que te visitan, agradecidos por tan bonito detalle! jaja!

A veces salen buenas cosas de las voces que oimos.... a veces....

Ok, muy bueno lo de hoy, sweety!

xoxoxoxoxo ♥♥

circe dijo...

que buenooooo....mira que según he entrado me ha recordado una de estas esculturas de Oteiza....Me encanta!!!...y cómo lo transportaste tu sólo???? madre mia!!...oye y lo de tu mujer...admirable...jajajaja

circe dijo...

pero....has cambiado algo?, alguna diferencia??...quizás la música....?...Pues lo dicho, el esfuerzo mereció la pena...y más con ese jardín de fondo...

Ivana Carina dijo...

Peroop... quedó HHAARMMOOSSSOO!!!
Me encanta Sweetie!! ♥
Esta nueva decó merece que hablemos bien! jajaja!!!
Bye!
xoxoxox♥♥

Carlota dijo...

Bonita historia que no sorprende viniendo de tí. Alas que parecen agujas de reloj paradas. Supongo que el tiempo se detiene mientras la observas, igual que cuando la viste en el camión. Me gustó mucho lo de la base hecha de arenisca para que admita humedad y verdín, así quedará integrada en el jardín. Afortunados pájaros. Un abrazo.

Belén dijo...

La mujer casada que duerme contigo es una santa :P

Es tuya? es precioso en serio!

besicos

Mandarina azul dijo...

Ñoco, Puertapájaro es el descanso de los pájaros, la puerta al cielo y el balcón de tu alma.

Abrazos de gorrión revoloteando. :)

Sintagma in Blue dijo...

Es magnífica.

irene dijo...

me encanta tu locura Ñoco...cuando las cositas te hablan para q crrees ...el arte es eso y los artistas tienen un oido privilegiado con su interior..felicidades por tu creación....si por fin me salen alas te prometo ir a posarme..
un beso

Paco Becerro dijo...

Apetecible lugar para revolotear, sí señor.

Confirmo todos los comentarios anteriores. Su señora una santa, la obra, muy bonita. Como la historia y tu forma de contarla.

Abarzos

Anónimo dijo...

interesante historia, interesante escultura resultado de esa "llamada". Yo también lo pienso, tienes una mujer tan buena y tolerante como tu jardín :-) Me gustó el título: puertapájaro, una simbiosis de conceptos muy original. Saludetes!

Romana Lopez dijo...

muy bonita,si señor y la historia tanbien.Digo yo que estara bien sujeta porque como se le caiga encima a alguien lo aplasta, con ese peso.ah alucine con la otra foto tanbien la de la soldadura es que oyes que artista eres.y estoy de acuerdo con lo demas en lo de tu mujer santa porque vamos me viene el mio con chatarra a casa y sale por donde vino (ahora ya no) eso si si me viene con algo tan bonito si le dejo entrar.Saludos

Anónimo dijo...

Lucky birds to have all this lovely sculpture for themselves.It's really gorgeous, I can tell you.And what about your wife? Super, and lucky too.She can enjoy your work.
HHK

Tesa Medina dijo...

Ñoco, me encanta.

Soy una loca de la escultura y me gusta toda desde los griegos a Chillida, y ahora tendré que decir hasta el pájaro de Ñoco.

Además siento especial atracción por el hierro, y eso que según mi analítica hasta tengo demás. Así que este post, con su historia de la chatarra diciéndote “llevadme a casa” y ese hermoso jardín, los pájaros, el verdín…

…vamos que me ha alegrado este ratito que me he tomado de relax, en mi trabajo.

Deberías hacer más esculturas. Se te da muy bien. No tan grandes, si las tienes que dejar en casa, claro.

Besos, Ñoco.

eSadElBlOg dijo...

Ñoco, eres un crack, si yo fuera una pájara ten seguro que tambien revolotearía por ahí. Siempre me sorprendes.

irene dijo...

Alucinante, yo no sería capaz de ver nada en unos trozos de hierro, definitivamente no tengo imaginación. Me parece originalísimo y práctico, ¿por qué no?, los pajaritos tienen un lugar donde posarse en su paso por tu jardín. No te quito mérito, pero claro, con ese jardín...
Yo como máximo, podría hacer una pajarita de papel, para que se posaran las moscas.
Un abrazo

Mad Hatter dijo...

Bonita escultura y bonito fresno de fondo.
La escultura me recuerda a una mezcla entre cigüeña roja y colibrí gigante.
Saludos.

Le Mosquito dijo...

Y a mi me gusta tu cordura. Echo de menos corduras así en mi entorno.
Sí.
:)

E Bosch dijo...

Increíble, Ñoco. Qué emocionante.
Le estoy dando vueltas a la cabeza a la idea de entrevistarte para "la mirada plana".
¿Cómo lo ves? ¿Se puede?

Un abrazo, amigo.

RMS dijo...

Ñoco, maestro. Admiro mucho ese ingenio tuyo, el ojo que tienes y tu capacidad para hacer arte.
Me gusta mucho la consistencia de tu trabajo, la armonía del trazo y corte, además esta parece estar suspendida en el aire como regresando de un vuelo, agitando alas....
Un verdadero placer ver cosas así.
¡Abrazo!

Desde mi Atalaya dijo...

Ñoco, amigo, que linda escultura has creado a partir de unos pedazos de fierro, bravo!! por ese alma de artista.
Me encanta tu sensibilidad, tu generosidad, mira tu, pensar en dar un soporte comodo a los pajaritos, y admiro a tu mujer. (ves que Amor se escribe con "P" ?)

Un super abrazo,

Soraya

Kiri dijo...

Raro pero original. Y la señora que duerme contigo...una santa...yo por mucho menos de eso...lo habría echado de casa. Supongo que por eso, duermo con Dido:-)

humo dijo...

Ella sabe quién eres. Los demás lo vamos descubriendo.
La historia es preciosa. La escultura, emocionante.
Bien por ti, Ñoco.

Meiga en Alaska dijo...

Oye, pero tú eres un pedazo de artista, chaval!!!! :)

Enhorabuena por hacer arte reciclando. :)

Un besote

PIZARR dijo...

Así más o menos empezaría Chillida y mira como terminó.

Me ha encantado tu primera obra y su emplazamiento, pero sobre todo me ha gustado su gestación.

Pensaba que era la única persona a la que los elementos mas diversos le hablaban... pero veo que nó.

Un saludo desde Bilbo

Anónimo dijo...

Creo, que el pajaro cuando yo le miro, vuela

yumbotronic dijo...

Felicidades Ñoco, ya te ganaste el calificativo de ArtistA hace tiempo, mucho tiempo.

Y felicidades por esta obra, muy tuya. Comprendo que te hablasen los hierros. Ahora cantan, trinan, gritan. No es una escultura silenciosa. Una invitación que mira al cielo.

Puertapájaro.

Muy tuya.

(ahora también nuestra)

Ester García dijo...

Me gustan las historias que explican historias que explican obras...

Haideé Iglesias dijo...

Me encantan los locos, jajaja,si será que me siento afin a ellos... Seguro que por eso se casó contigo, seguro :)
Bueno, a los pajaros no les importará posarse en unos hierros que les susurran cosas bonitas, pero yo casi que me quedo con los arboles de atrás... si... creo que si...
Deliciosa música
Un fuerte abrazo :)

Contadora de Libros. dijo...

Qué bonita escultura! Y qué preciosa historia!
No sabía yo que tuvieras esas habilidades, eres un artista!!!! y una caja de sorpresas.
El jardín se ve bien lindo, la escultura preciosa, la idea más, cuando algo te llama y te dice algo es que te remueve por dentro y no te deja indiferente. Enhorabuena por haberla hecho realidad.
Y gracias por compartir.
Un beso!